Retiros de Ayahuasca y Psicología Transpersonal

Artículo publicado en la página web de Sapan Inka

Cusco, 2 de agosto del 2021

Por Erik Hendrick Carpio

La integración de la sabiduría ancestral y la ciencia contemporánea es un hecho inevitable. Hay que reconocer que en diversos países del mundo poco a poco está surgiendo un nuevo paradigma que contempla el uso de tecnologías espirituales ancestrales como la meditación y el uso de plantas sagradas como la Ayahuasca. Está surgiendo un nuevo enfoque científico que busca comprender la naturaleza de la conciencia y busca conocer a profundidad la estructura de la psique humana, y por ello, cada vez es mayor la atención que se presta al legado de sabiduría de las antiguas culturas. La sabiduría y la cosmovisión del mundo antiguo pueden constituir una esperanza para el mundo moderno. Las enseñanzas místicas provenientes de diversas culturas pueden enriquecer y transformar la comprensión de la psicología humana y abrir un campo de investigación hacia la comprensión de la naturaleza espiritual del ser humano.

Desde hace mucho tiempo en diversas culturas han existido seres humanos o grupos de personas interesados en el conocimiento profundo del alma humana y en descubrir distintas posibilidades de desarrollo humano. Ejemplo de ello lo es el mundo oriental y la psicología budista que tiene más de 2500 años de desarrollo, los ejercicios espirituales en la mística cristiana, las prácticas mística sufies, el sendero místico del arte hermético y la alquimia; y entre las prácticas más modernas es posible mencionar a la antroposofía de Rudolf Steiner, el Cuarto Camino de Gurdjieff y Ouspensky, la Psicosíntesis de Assagioli, el proceso de individuación de Jung, o la práctica integral de vida de Ken Wilber. Todas estas escuelas antiguas y modernas han tenido como objetivo fundamental la búsqueda del desarrollo humano, el crecimiento interior, el conocimiento espiritual y la evolución de la conciencia humana.

En la civilización andina también existieron tradiciones, prácticas y técnicas espirituales que perseguían la evolución del ser humano, y en estas tradiciones se estrechaba el vínculo del ser humano con la naturaleza y el cosmos a través de procesos rituales y el uso de plantas sagradas como el San Pedro y la Ayahuasca. Estos rituales y el uso de plantas sagradas permitían, y permiten, el acceso a estado expandidos de conciencia, que brindan la posibilidad de experimentar sentimientos de unidad cósmica, un conocimiento profundo de nuestra propia naturaleza, navegar por mundos y dimensiones paralelos de la existencia, y principalmente, reconectarnos con la dimension espiritual  y con un camino de crecimiento y evolución.

A través del uso de plantas sagradas es posible conocer una parte de nuestra propia naturaleza que permanece escondida a modo de misterio y fenómenos incomprensibles. Después de una experiencia con plantas sagradas muchas veces tenemos que aceptar que gran parte de la existencia aún nos es desconicida, que el mundo y la realidad no es únicamente de orden o naturaleza material, que existe un plano de la existencia o la realidad que es más sutil, y que durante los estados ordinarios de conciencia, es decir, durante el estado habitual de conciencia, este plano es casi impenetrable o imperceptible. Los místicos de distintas épocas y  de distintas regiones del mundo a lo largo de la historia humana han podido acceder a estos planos sutiles de la existencia y a partir de sus experiencias han adquirido conocimientos y sabiduría que luego han podido compartir con sus contemporáneos, y  hoy constituyen un legado del conocimiento espiritual. Este tipo de conocimiento es inmenso y la ciencia recién ha dado los primero pasos en la comprensión de la dimensión espiritual y la naturaleza humana.  Aún hay mucho por investigar. Y en este sentido, la ciencia, a través de la Psicología y la Psicoterapia, puede convertirse en una herramienta extraoridnaria para explorar la naturaleza de la psiquis, nuestra dimensión espiritual, estados de conciencia amplificados y nuestro potencial de desarrollo humano y evolución de la conciencia. La ciencia no establece verdades absolutas, es una herramienta para la adquisición de nuevos conocimientos.

Fue en el ámbito de la ciencia donde nace la Psicoterapia moderna. Es cierto que un gran sector de la Psicoterapia, desde sus inicios, o bien tuvo una visión netamente materialista de la existencia, o solo era capaz de observar el lado negativo del inconsciente humano. Sin embargo, también desde sus inicios, la Psicoterapia intentó entender la naturaleza de los fenómenos espirituales, y por ejemplo el psicoanalista Herbert Silberer, quien también era un miembro de la Orden Rosacruz, dedicó sus esfuerzos en comprender el aporte de la alquimia y el arte hermético a la nueva ciencia psicológica,  y en el año 1914 escribió un libro muy importante y muy poco conocido, llamado: Problemas de la mística y su simbolismo (Probleme der Mystik und ihrer Symbolik). En esta sumamente interesante e importante obra se aborda de manera muy dinámica el estudio de la Alquimia y su importante influencia para el estudio de la psicología humana y el desarrollo de la personalidad. Es muy probable que los estudios de Silberer fueron una gran fuente de inspiración para las teorías de la Psicología profunda de C.G. Jung, especialmente en cuanto a la concepción de los arquetipos y el proceso de individuación, y también en lo que concierne a los amplios estudios de alquimia que posteriormente Jung elaboró. C.G. Jung reconoce en su obre Mysterium Conunctionis el legado de Silberer de la siguiente manera: "A Herbert Silberer, que por desgracia falleció demasiado pronto, le corresponde el mérito de haber sido el primero en descubrir los hilos secretos que van de la alquimia a la psicología de lo inconsciente." Lamentablemente, Silberer dejó de existir a corta edad, se dice que debido a un acto de suicidio, sin embargo, existió la sospecha que su muerte se debió a un acto criminal que no fue debidamente investigado, y por ello, lamentablemente no demostrado. Es posible suponer esto, debido a la naturaleza de los estudios de Silberer, sus conocimientos y su integridad como ser humano. 

En la época en que Silberer escribía sobre la alquimia y su relación con la psicología, C.G. Jung aún no mostraba interés por el estudio del arte hermético y la alquimia. Pero, al pasar los años y empezar a tener contacto con diversos textos de la edad media y vivir profundas experiencias visionarias y místicas, poco a poco, Jung empezó a acercarse al estudio del arte hermético y la alquimia, y sus últimas obras están profundamente relacionadas con el estudio de la alquimia, puesto que Jung veía en ella una analogía con el proceso de individuación o proceso de desarrollo de la personalidad, un proceso de autorrealización. Para Jung la individuación era un proceso de transformación capaz de llevar al ser humano hasta la unificación con el Self o Sí-mismo y para ello el individuo debía trascender su vida anímica difusa y misteriosa en una especie de travesía como la que se propone en ciertos textos de alquimia, un camino espiritual que conduce a una profunda transformación denominada "transmutación", puesto que la vida del alquimista podía ser renovada por su trabajo interior inciado en el atanor. 

Definitivamente, C.G. Jung debe ser considerado como una de los principales precursores de la Psicología Transpersonal, la cual es una rama de la psicología dedicada a la exploración y el estudio de la dimensión espiritual del ser humano. La Psicología Transpersonal no ha sido aún completamente aceptada a nivel mundial. Hay países como Perú, en donde las universidades ni siquiera dictan cursos relacionados a esta importante rama de la psicología, y en el ámbito profesional son muy pocos los psicoterapeutas preparados para abordar técnicas terapéuticas relacionadas a lo transpersonal. Sin embargo, Perú es uno de los pocos países del mundo en donde el uso médico ancestral de la ayahuasca tiene un estatus legal, puesto que dichos usos son considerados un patrimonio cultural de la nación en Perú. Y es especialmente en Perú donde se encuentran los principales centros de retiro con Ayahuasca, y en algunos de estos centros se produce una integración entre los conocimientos ancestrales amazónicos relacionados al uso de la ayahuasca y métodos terapéuticos relacionados a la Psicología Humanista y Transpersonal. 

Otro psicoanalista precursor del estudio de la dimensión espiritual fue Roberto Assagioli, el creador de la Psicosíntesis, un método de Psicoterapia, de tipo holístico e integrativo, que tiene como finalidad el desarrollo del potencial oculto de evolución del ser humano, el desarrollo de la personalidad de un modo dinámico y el progresivo establecimiento de la armonía, la integración y transformación de los distintos elementos de la personalidad. Assagioli es considerado uno de los padres de la Psicología Transpersonal, fue uno de los primeros terapeutas que escribió en el Journal of Transpersonal Psychology.  Sus métodos terapéuticos han sido poco difundidos, y en países como Perú resultan casi totalmente desconocidos. La terapia psicoespiritual de Roberto Assagioli brinda aportes muy importantes a la terapia de integración psicodélica y a la terapia de integración post ceremonias con ayahuasca. 

Espero que en Perú en los próximos años empiece a crecer el interés por el estudio de lo transpersonal y las facultades de psicología de las universidades peruanas empiecen a incluir en sus planes de estudio el curso de Psicología Transpersonal como una parte importante en la formación de los futuros psicólogos. Y quizás futuramente alguna universidad peruana se atreva a otrogar una maestría en esta importante rama de la Psicología.